
“Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él. El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios. Y esta es la condenación: que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas” Juan 3:17-19
En días de la predicación de Noé la gente se burlaba de la enseñanza que este daba advirtiéndoles de la ira de Dios que estaba pronta a ser derramada sobre toda la humanidad, era científicamente imposible que algo como un diluvio aconteciese en un entorno donde nunca había llovido (ellos solo conocían un vapor que subía por la noche y regaba todo), pero en contra de todo pronóstico más acertado, en contra de toda estadística humana, el diluvio vino y toda esa generación incrédula fue destruida y lo más triste es que pudieron estar en el arca pero ellos despreciaron el ofrecimiento y amaron más su maldad.
Hoy el arca que te puede salvar es la obra de redención hecha por Cristo en la cruz, para todos la invitación ha sido hecha y Dios se asegurara de que todos escuchen el mensaje del evangelio y con paciencia sufrirá el desprecio de los que prefieren no creer, y así como el arca de Noé no fue hecha para condenar al mundo sino para preservar de la destrucción, del mismo modo Cristo no vino al mundo para traer condenación sino salvación y de hecho todo aquel que en Él cree no es condenado, pero el que no cree ya ha sido condenado.
No es suficiente el conocimiento intelectual que te indica que es cierto: Cristo en verdad murió en la cruz, porque este conocimiento y está fe la tienen muchos, este conocimiento no es suficiente porque no hace ninguna diferencia en la vida del hombre, la fe que Dios demanda respecto a Cristo es que aceptemos que él nos libertó de la esclavitud de pecado que condenaba nuestra vida, el murió en la cruz para hacernos libre del vicio, del adulterio, el orgullo, la codicia y de obras de maldad semejantes a estas, el murió en la cruz para que vivamos por encima de todas estas conductas pecaminosas y el creer en Cristo te da esa posibilidad… la luz ya vino al mundo para librarte de las tinieblas, pero lastimosamente como en días de Noé la luz es menospreciada porque se ama más el pecado y las obras de maldad… la satisfacción del pecado es pasajera, Cristo tiene para ti verdadera felicidad.
Oración: Señor tu Palabra dice que solo a través de la fe podemos ser salvos, no hay obras que podamos anotar a nuestra cuenta que puedan librarnos de la ira venidera. Oh Señor ya hay un pueblo al que tu diste vida cuando estaban muertos en delitos y pecados para mostrar en ellos las sobreabundantes riquezas de tu gracia y tu gran bondad. Señor tú conoces mi condición, tal vez yo no niego la realidad de tu obra, pero aún no he creído con una fe que me haga una nueva creación. Señor tú sigues siendo rico en misericordia, por favor ten misericordia de mí, ayuda mi incredulidad, abre mi corazón a tu Palabra y ayúdame a creer. Que mi vida también pueda ser contada junto a todos aquellos que hoy son el testimonio de tu sobreabundante gracia. Amén
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