Libres para vivir en libertad

“quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia” 1 Pedro 2: 24a

Tanto el sufrimiento vicario de Jesús y Su muerte sustitutiva se dan como los medios que Dios usa para hacernos justos como Su Hijo. Esto es tan importante y tan contundente, que necesitamos hacer una pausa aquí por un momento y considerar ¿Te parece una buena noticia? ¿O se siente como si las buenas nuevas de la cruz se dieran con una mano y se quitaran con la otra? ¿Se siente como una buena noticia que el mensaje de la cruz, por un lado, es un levantamiento de la culpa y, por otro lado, es una imposición de una carga a no vivir en pecado? Por un lado, el sufrimiento y la muerte de Jesús son "por nosotros" y "quitan nuestros pecados", eso se siente liberador, gozoso y esperanzador. Por otro lado, el sufrimiento y la muerte de Jesús están diseñados por Dios para crear personas que sigan los pasos de Jesús y que vivan en justicia.

Hay muchas personas hoy que sienten la primera obra de la cruz como una buena noticia liberadora y que sienten la segunda como una mala noticia gravosa. Para ellos, la gracia de la cruz es una cosa: liberación de la culpa y la vergüenza. Y cuando escuchan que la gracia de la cruz no es solo la liberación de la culpa del pecado, sino también la liberación del poder del pecado, no se siente tan bien. El diseño de la cruz para liberar del poder esclavizante del pecado, así como de la culpa del pecado no disminuye las buenas nuevas; lo duplica ¿Sería realmente una buena noticia si la Biblia enseñara que la muerte de Cristo quitó la culpa del pecado y nos dejó esclavizados a su poder? Si te parece una buena noticia, que podrías seguir viviendo como lo hace el mundo, solo que, sin castigo, entonces lo que muestra es que amas el pecado y no a Dios. Pero si anhelas ser librado por la cruz no sólo de la culpa del pecado, sino también del poder esclavizante del pecado, entonces este mandamiento a morir al pecado no disminuye las buenas nuevas, las duplica.

¿Qué significa morir al pecado? ¿Qué significa eso en nuestra experiencia? ¿Cómo sucede eso? cuando la palabra de la cruz irrumpe en nuestro corazón por el poder del Espíritu de Dios, y nos damos cuenta de que Dios nos ama tanto que entregó a Su Unigénito Hijo para ponernos bajo Su cuidado, protección, provisión y guía, en ese momento morimos a la mentira del pecado. Morimos al poder del engaño del pecado que trata de persuadirnos de que se puede tener un futuro mejor a través del pecado que a través de la justicia. Lo que causa nuestra muerte al pecado es la obra de la cruz que nos convence en lo profundo de nuestro corazón que Dios está comprometido con nosotros como un Pastor poderoso. Estamos vivos para el pecado, y creyendo en el pecado, y siguiendo al pecado, hasta que la cruz desata sobre nosotros el amor vencedor de Dios y nos constriñe a ver que nos estamos desviando, nos autodestruimos en el camino del pecado. Y cuando la cruz libera ese poder en nosotros, morimos al pecado y despertamos a la belleza de la justicia en el pasto de nuestro Pastor que todo lo satisface ¡Aleluya!