Discípulos

Publicado el 18 de abril de 2024, 3:50

“…y a los discípulos se les llamó cristianos por primera vez en Antioquía” Hechos 11:26b

Antes de que el título de cristiano fuera ampliamente aceptado, ¿cómo eran llamados los primeros seguidores de Cristo? Simplemente los llamaban “discípulos”. Discípulo era la referencia preferida para los creyentes. Pero, ¿qué es un discípulo? Básicamente, un discípulo es un estudiante. Un discípulo es aquel que se disciplina a sí mismo en las enseñanzas y prácticas de un maestro, es decir, en nuestro caso somos aquellos que se disciplinan a sí mismo para aprender y seguir los principios y fundamentos de Cristo. A sus discípulos el Señor sólo les decía una palabra: “Sígueme” (Marcos 1:17; 2:14) Un discípulo es un seguidor, uno que confía y cree en un maestro y sigue sus palabras y ejemplo. Ser un discípulo de Jesucristo es estar en una relación con Jesús, es buscar ser como Jesús… en otras palabras, seguimos a Cristo para ser como Cristo (1 Corintios 11:1) Nadie puede realmente llamarse a sí mismo un discípulo de Jesús si no está dispuesto a obedecerlo.

El mundo está inundado de maestros compitiendo por oyentes y seguidores. Escuchar a Jesús es lo que un discípulo cristiano hace. Cuando Jesús habla, el discípulo escucha. El discípulo se aferra a cada palabra del Maestro como si esa palabra fuera pan para el hambriento o agua para el sediento. No puedes ser cristiano y no escuchar a Jesús. Pero escuchar a Jesús no es suficiente. Un discípulo no escucha y luego se aleja como si las palabras del maestro no tuvieran impacto. Jesús llama a Sus discípulos a aprender y a escuchar, aquellos que han sido enviados por el Padre a Él le escucharan decir: “Tomad mi yugo sobre vosotros y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y hallaréis descanso para vuestras almas” (Mateo 11:29). El discípulo es un aprendiz, y las palabras de Cristo le son de peso. Aprender de Cristo es el mayor deseo del discípulo. Es la base de todo lo que cree. Con gozo recibe las palabras de su Maestro. Estas son su pan de cada día, medita en ellas día y noche (Salmo 1:2).

Pero escuchar y aprender no es suficiente, nadie puede realmente llamarse a sí mismo un discípulo de Jesús si no está dispuesto a obedecerlo. El discípulo, el que realmente escucha y aprende, pondrá en práctica lo que aprende. Para el discípulo, la obediencia no es opcional. Jesús ha demostrado ser digno de toda obediencia. Aquellos que lo conocen mejor están más conscientes de esto. Poner en práctica las enseñanzas del Maestro es el fruto del verdadero discipulado. Jesús mismo declaró que aquellos que lo aman demuestran su amor por Él guardando Sus mandamientos (Juan 14:21, 23; 15:10). Algunos tratan de hacer una distinción entre ser un discípulo y ser un cristiano. Sin embargo, la Biblia nunca hace tal distinción. Antes de ser llamados cristianos, fueron llamados discípulos. Ser un discípulo de Cristo es ser un cristiano. Ser cristiano es confiar en Cristo, escuchar a Cristo, aprender de Cristo y obedecer a Cristo. En consecuencia, ser cristiano es ser un discípulo. Fue así en el comienzo y así sigue siendo hoy.

Valoración: 5 estrellas
6 votos