“En verdad les digo que, si el grano de trigo no cae en tierra y muere, se queda solo; pero si muere, produce mucho fruto. El que ama su vida la pierde; y el que aborrece su vida en este mundo, la conservará para vida eterna” Juan 12:24-25
¿Qué debe morir en mí para que pueda ser un padre, esposo y creyente más fructífero? ¿Qué debe morir en nosotros como iglesia para que seamos más fructíferos?” En primera instancia dos cosas debemos tener en cuenta: si eres cristiano ya has muerto, y si eres cristiano, Dios te llama a morir diariamente. En las palabras de Jesús, Lucas 9:23: “Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día y sígame” … La palabra diariamente muestra que seguir a Jesús significa morir todos los días, no sólo morir de una vez por todas. Cada día debo experimentar en la práctica lo que es verdadero de mí en mi posición en Cristo. Estoy de una vez por todas “crucificado con Cristo” (Gálatas 2:20; 5:24) — esa es mi posición; mi vida está escondida con Cristo en Dios (Colosenses 3:3). Por lo tanto, debo creer en esta realidad, actuar sobre ella y experimentarla. Debo llegar a ser en la práctica lo que soy en mi posición, es decir: la práctica confirma la realidad de mi posición en Cristo.
Pablo también dice en Romanos 6, después de decir en el versículo 5 que “fuimos unidos con [Cristo] en la semejanza de su muerte”, y después de decir en el versículo 6 que nuestro “viejo hombre fue crucificado con Él”, entonces dice en el versículo 11, “Considérense muertos al pecado, pero vivos para Dios en Cristo Jesús”. En otras palabras, estás muerto con Cristo: esa es tu posición; por lo tanto, “consideraos muertos al pecado”: demostrad vuestra posición con vuestra práctica. Muestra quién eres realmente en Cristo confiando en sus promesas por encima de todo.
Entonces, debo cuestionar seriamente mi modo de vida. ¿Hay algo por lo que Dios me está llamando a morir para que pueda experimentar más plenamente mi posición en Cristo? ¿Estoy luchando contra mi propia naturaleza como cristiano al tratar de mantener vivo algo que Dios sentenció a muerte cuando me convertí en cristiano? ¿Hay algo que impide que sea fructífero en Cristo, algo que me impide verlo y mostrarlo, algo a lo que deba morir? Señor, muéstranos lo que es; y obedeceremos la palabra y la haremos morir por el Espíritu. Amén
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