
“No que hable porque tenga escasez, pues he aprendido a contentarme cualquiera que sea mi situación. Sé vivir en pobreza, y sé vivir en prosperidad. En todo y por todo he aprendido el secreto tanto de estar saciado como de tener hambre, de tener abundancia como de sufrir necesidad. Todo lo puedo en Cristo que me fortalece” Filipenses 4:11-13
- La voz de Dios es consistente con las circunstancias que Él orquesta no hay nada más confuso que la voz de Dios para un creyente insatisfecho… en medio de nuestras circunstancias no podemos olvidar que TODAS ellas han sido orquestadas por Dios, el Dios soberano que gobierna el cielo y la tierra, absolutamente NADA ha sido desapercibido para Él… tener esta certeza en nuestras vidas es lo UNICO que puede dar tranquilidad y paz en TODO lo que vivamos. Estoy tratando y no escucho, no entiendo… en lugar de escoger lo que tiene mejor apariencia vayamos a Él en oración: Señor enséñame que está dificultando que yo pueda oír tu voz (porque sé que me estás hablando), Señor guíame. En todas las penalidades de Pablo NUNCA estuvo fuera de la voluntad de Dios, porque TODAS ellas fueron ordenadas por Él.
- La voz de Dios es consistente con la responsabilidad que Él me ha dado cuando yo soy responsable en aquello que Dios me ha encomendado hay muchos pecados que yo no cometeré porque no estaré disponible para hacerlo… Pero, cuando no lo hago yo estaré en otro lugar y en otra ocupación diferente a lo que Dios desea y ahí con toda seguridad llegará la tentación como sucedió con David y Betsabé (2 Samuel 11:1). Cada uno de nosotros tenemos un rol, una responsabilidad por la que daremos cuenta. Dar prioridad a otras cosas por encima de lo que yo sé que Dios espera de mí como conyugue, padre o madre, hijo, discípulo… etc., es ser irresponsable y Dios no se complace en la irresponsabilidad, no me respalda, no me guarda, no me habla… y yo tomaré decisiones erradas.
- La voz de Dios es consistente con mi buen testimonio dice Filipenses 2:14-15 “Haced todo sin murmuraciones y contiendas,para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha en medio de una generación maligna y perversa, en medio de la cual resplandecéis como luminares en el mundo” ¿Entendiste cuál es tu llamado como cristiano? Fuimos llamados a resplandecer como luminares en medio de una generación que está torcida y es perversa... De manera que todo aquello que es contrario a este llamado, todo aquello que trae mancha a mi vida yo puedo saber con toda certeza que no es la voluntad de Dios… Eso que estas oyendo, eso que estás viendo o leyendo si trae mancha a tu vida, eso no viene de Dios (aun cuando no haya un versículo explicito para señalarlo como pecado) Si hay algo que yo estoy haciendo o que yo me siento liderado a hacer que no es consistente con un buen testimonio, que no contribuye a que mi vida resplandezca como un luminar eso no viene de Dios. ¿Qué viene de Dios? Todo aquello que me hace resplandecer como luminar y que no contradice ninguno de los principios que hemos enumerado anteriormente.
De esta manera finalizamos está muy resumida lista de principios para discernir la voz de Dios… Esta lista puede ser más amplia en la medida en que nos disponemos para escudriñar las Escrituras para conocer más a Dios en Su carácter y obras. Finalmente, consideremos lo dicho por Cristo: “Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano” (Juan 10:27-28) El pastor siempre está hablando a Su rebaño, lo importante como pueblo de Dios no es tener todo lo que desea nuestro corazón sino hacer de todo corazón lo que Dios quiere que hagamos, no nos desviemos de este propósito.