
“Y no solo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia; y la paciencia, carácter probado; y el carácter probado, esperanza. Y la esperanza no desilusiona” Romanos 5:3-5a
Nada puede decepcionarnos o robar el gozo de Dios en nosotros, y nada puede robar nuestro gozo en Él: ni lo alto ni lo profundo, ni lo por venir, ni lo pasado, ni el cáncer, ni la esclerosis lateral amiotrófica, ni la escasez material, ni las dificultades maritales, ni siquiera la muerte… (Romanos 8:39), porque todas las cosas son nuestras (1 Corintios 3:21). Porque nosotros somos de Cristo, y Cristo es de Dios (1 Corintios 3:23). Por lo tanto, podemos estar tristes y, sin embargo, estar SIEMPRE alegres… nosotros somos ese pueblo que por causa de Cristo y Su obra en nosotros que quizá no tenga nada y aun así lo posee todo (2 Corintios 6:10).
Hemos sido tan enriquecidos, se nos ha concedido tanto en Cristo… y a quien mucho se le da, mucho se le demandará (Lucas 12:48). Nuestro sufrimiento puesto al servicio de la gloria de Dios tal vez sea doloroso y difícil de llevar, pero allá afuera de nosotros mismos y nuestras circunstancias ciertamente hay personas padeciendo quizá lo mismo o tal vez en condiciones mucho peores a quienes es necesario que les sea llevada la verdad de que su dolor no ha sido producido por la maldición de un brujo o porque el diablo está enseñoreándose de sus vidas…. Ellos necesitan entender que SE TRATA DE DIOS, Él tiene el control. Llevemos la luz de Jesús, seamos el medio que Dios use para que puedan ver que hay en ellos una miseria peor de la que ni siquiera son conscientes y que tal vez el sufrimiento que están viviendo es sólo el medio de gracia que Dios está usando para abrir sus ojos a la realidad de su necesidad de redención. Permitamos que a través de nuestros padecimientos la luz de Cristo brille sobre aquellas vidas que están asentadas en regiones de sombra de muerte… Iglesia has sido bendecida con tanto que es necesario que de ese mucho que has recibido debas transmitir bendición y esperanza a los demás.
Dice Santiago 1:2-4 “Tengan por sumo gozo, hermanos míos, cuando se hallen en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de su fe produce paciencia, y que la paciencia tenga su perfecto resultado, para que sean perfectos y completos, sin que nada les falte” y Romanos 8:18 “Pues considero que los sufrimientos de este tiempo presente no son NADA comparados con la gloria que nos ha de ser revelada” … En otro tiempo sufríamos como los que no tienen una esperanza… pero en Cristo nuestro sufrimiento sí que tiene un propósito, ahora haces parte de un pueblo que comparte no sólo tus sufrimientos sino también el sufrimiento de Cristo y Él te dará la gracia un día a la vez para sobrellevarlo. La esperanza es buena, pero vivimos en un mundo oscuro y enfermo bajo la maldición del pecado. Y Dios no le debe absolutamente nada a este mundo rebelde. ¿Pero no es maravilloso el hecho de que Dios no quiere que nadie perezca? Él quiere convencer a este mundo incrédulo, sarcástico y escéptico de Su poder para salvar, de Su capacidad para sostener y de Su deseo de darnos de Su esperanza y nuestros sufrimientos son la mejor herramienta para hacerlo.
Añadir comentario
Comentarios