La pieza que hace falta

Publicado el 21 de octubre de 2024, 3:45

Por lo cual dice: Despiértate, tú que duermes, y levántate de los muertos, y te alumbrará Cristo. Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos” Efesios 5:14-16

Cuando un padre se desconecta, abandona el hogar o muere joven, sucede lo mismo con el corazón del niño. Se genera un vacío masivo de necesidades insatisfechas en todas las áreas importantes que son responsabilidad del padre. Cada vez más niños se van a dormir sin que su padre este en el hogar. La ausencia física paterna es hoy el problema social y familiar que enfrentan las naciones. Tiene sentido, entonces, que la Escritura declare que Dios tiene un lugar especial en su corazón para dos grupos en específico de personas: huérfanos y viudas ¿Qué tienen en común para que sea así? Han perdido al hombre más importante en el rol del liderazgo en sus vidas.

Para los hombres es cada vez más difícil cumplir mejor su rol, hay muchos obstáculos que les apartan de su misión de liderazgo. Múltiples factores que socavan la paternidad, de los cuales podemos mencionar:

  • El divorcio: el matrimonio mantiene a los padres conectados con sus hijos. Los nacimientos ilegítimos y los divorcios son dos de los factores más importantes para separar a los padres de los hijos. Antes las parejas permanecían juntas por el bien de sus hijos. Pero la generación actual está convencida de que los hijos estarán mejor si sus infelices padres se separan. Las estadísticas revelan lo contrario… lo mejor para los hijos es ver a sus padres arrepentirse de su egoísmo, perdonarse y volver a comprometerse con su matrimonio. La conveniencia del divorcio de común acuerdo se ha hecho presente a un alto costo, y son los niños inocentes los que han sido forzados a pagar ese precio.
  • El trabajo: antes de la revolución industrial, los padres mayormente trabajaban en su casa y sus hijos a penas podían trabajaban con ellos, lo cual le daba a los padres oportunidades de transmitir su fe y sus valores de manera natural. “El avance de la industria” obligo al hombre a salir de su casa y los hijos quedaron solos con la madre, disminuyendo así la influencia paterna. Cuando el papá finalmente llegaba a casa estaba demasiado cansado como para participar de la vida en el hogar, la familia comenzó a obtener las sobras de su atención y energía. Hoy el problema persiste y se agudiza. Si el hombre no pone límites sus prioridades laborales le apartarán sistemáticamente de su esposa y de sus hijos, que anhelan y necesitan su presencia.
  • El esparcimiento: el hombre de hoy pasa más tiempo viendo televisión o navegando en internet que sosteniendo una conversación significativa con sus hijos. Si los hijos están con su padre mientras está entretenido, es el televisor el que se convierte en el elemento que influirá sobre ellos, y no el padre.
  • La iglesia: es doloroso incluir este elemento, pero con demasiada frecuencia se guarda silencio ante esta realidad y no se enseña a los hombres lo que la palabra de Dios dice en cuanto a su rol y sus responsabilidades. Sumado a esto, muchas actividades congregacionales separan a las familias, al punto que muchos hijos no ven a sus padres servir a Dios, adorando ni orando, porque no están con ellos mientras lo hacen.

No son estas los únicos factores que socavan la paternidad, desafortunadamente hay muchos más… el diablo jamás dejará de atacar lo que Dios prioriza. Se ha declarado un acérrimo ataque contra ti como esposo y padre. Los hombres se enfrentan a una sociedad que decidida e intencionalmente quiere quitarles de en medio. Y por eso ahora, más que nunca, necesitamos hombres comprometidos que entiendan y defiendan su propósito.

Oración: amado Señor tú conoces y te compadeces de nuestra condición. El estar separados de ti nos ha hecho indiferentes al punto de hacernos inútiles en aquello que en verdad es el propósito de nuestras vidas, perdona oh Señor porque intencionalmente rechazo comprometerme, ten misericordia y obra en mí, haz lo que sea necesario para que yo sea fiel al llamado que tú me has hecho y pueda honrarte a través de mi obediencia, Señor que mis hijos puedan recibir de mí lo que tú has determinado que yo les ofrezca. Amén

Valoración: 5 estrellas
5 votos

Añadir comentario

Comentarios

Shirley García
hace 6 meses

Amén 🙏🙏🙏