
“Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá” Mateo 7:7
El Señor Jesús nos anima a buscar a Dios en oración, y la Biblia en todo su contexto nos anima a orar en todo tiempo con fe y sin desmayar. Pero a pesar de esto Dios no ha prometido hacer conforme a lo que estamos pidiendo, porque Él es soberano, aún en la manera como responde a nuestras oraciones.
Muchos enseñan equivocadamente que si Dios no te da lo que estás pidiendo en oración es porque no tienes fe, si Dios no te concede lo que has pedido es porque Él considera que es bueno para ti decirte no en esa petición. Fe no es solo pedir, fe también es pedir con la convicción de que Dios sabe que es mejor para nosotros. Pero ¿acaso Cristo no ha dicho pedid y se os dará? Eso es cierto, pero Él también dijo: “buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá” en esta promesa Cristo nos está dando la certeza de que Dios nos dará lo que pedimos, pero eso no es todo lo que Él dice, en los versos 9-11 del capítulo 7 de Mateo Él hace una ampliación a este tema para hacerlo una promesa más gloriosa para nosotros. Él dice: “¿Qué hombre hay de vosotros, que, si su hijo le pide pan, le dará una piedra? ¿O si le pide un pescado, le dará una serpiente? Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará buenas cosas a los que le pidan?” que el Padre que si es omnisciente sea quien escoja para nosotros las buenas cosas es mucho mejor que seamos nosotros quienes determinemos lo que es “mejor” para nosotros. Un buen padre nunca les dará a sus hijos todo lo que piden, un buen padre que sabe discernir qué cosas pueden perjudicar o dañar a su hijo dirá a muchas de las peticiones de sus hijos no, porque los ama ¿Cuánto más Dios?
A pesar de que Cristo también dijo que al que cree todo le es posible, esto no es una promesa absoluta de que tendremos todo lo que pedimos sino más bien una invitación a creer en Él… cree que Él tiene poder para hacer cualquier cosa que tú le pidas, porque nada hay imposible para Él, pero también confía en que Él te ama lo suficiente como para darte SÓLO aquello que es bueno para ti. Y ¿qué hacemos entonces con lo que dice 1 Juan 5:15: “¿Y si sabemos que Él nos oye en cualquier cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho”? Bueno este texto tiene un contexto y debe ser interpretado a la luz de este. El verso anterior nos dice: “Y esta es la confianza que tenemos en Él, que, si pedimos alguna cosa conforme a Su voluntad, Él nos oye” Dios promete que nos dará lo que pedimos siempre y cuando esto que pedimos haga parte de Su voluntad para nosotros, si nuestras peticiones se conforman al propósito de Él para nuestras vidas, Él nos las dará. ¡Eso es infinitamente mejor que simplemente tener lo que pedimos! Él está trabajando en formar la imagen de Su Hijo en nosotros (Romanos 8:29) y responderá las oraciones que contribuyan a eso.
Finalmente, lo más importante ¿Cómo sé si lo que estoy orando es la voluntad de Dios? Bueno en aquello que la Biblia ordena o prohíbe explícitamente es fácil saberlo, pero cuando se trata de cosas que la Biblia no ordena o prohíbe explícitamente, es más complicado decir con antelación si lo que pedimos es o no la voluntad de Dios. Dios nos manda a orar y a confiar que Él nos dará lo mejor, dependiendo de cómo Él responda sabremos si fue o no Su voluntad. Dios espera que oremos en todas nuestras circunstancias, que lo hagamos confiando en Su buena voluntad para con nosotros, que lo hagamos creyendo que para Él no hay nada imposible, pero que sobretodo lo hagamos con la resolución de que sin importar cuán bueno lo vean mis ojos: Padre, no sea como yo quiero sino como Tú quieres. Amén
Añadir comentario
Comentarios
Amén 🙏🙏🙏